La habitación tenía una vista impresionante del mar.

Llegamos y la atención en la recepción fue muy deficiente, ya que la persona que estaba allí no tenía ni idea de lo que hacía. Intenté extender mi estancia, pero no supieron ayudarme en nada. El desayuno comenzaba muy tarde, a las 9:00, lo que nos obligó a buscar alternativas fuera.

A. Vistas impresionantes
B. Restaurante delicioso
C. Personal atento

A. Falta de ascensor
B. Limpieza regular
C. Desayuno tardío

me encantaría volver

La situación es increíble, enfrente del puerto. Habitación amplia, con baño privado, calefacción y TV plana. Las vistas al pueblo son preciosas. Ofrecen desayunos muy buenos y comida riquísima en el restaurante. Aparcamiento fácil. Todo muy limpio, un lugar perfecto para relax.

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar con una sonrisa. Además, la limpieza de las habitaciones era impecable.

La falta de ascensor es notable y puede ser complicado si llevas mucho equipaje o tienes dificultades para subir escaleras.

Disfruté de desayunos bien elaborados y toda la atención al detalle en cada plato. Aunque no hay ascensor y eso es un poco incómodo, la experiencia culinaria superó cualquier inconveniente.

disfrutamos de una estancia muy agradable en porto do barqueiro. el hostal es super limpio y el personal fue muy profesional y amable. cenamos y desayunamos en el restaurante y la comida estaba deliciosa.

fue complicado encontrar aparcamiento.

Las vistas desde la habitación son increíblemente impresionantes, con un ventanal que se extiende por toda la pared y te permite tocar el mar. La ubicación es perfecta, en un pueblito con encanto donde puedes explorar casas marineras, además de tener restaurantes y tiendas a solo unos pasos.

Nos tocó una habitación abuhardillada que era demasiado calurosa, lo que se complicó aún más por los mosquitos, ya que no podías abrir la ventana. La primera noche fue un caos matando mosquitos, aunque luego nos ofrecieron un aparato eléctrico que mejoró la situación. hay que tener en cuenta que el hotel no tiene ascensor, lo que dificulta el subir las maletas, especialmente si llevas mucho equipaje.

Vistas espectaculares y comida deliciosa

Disfruté de una estancia muy agradable en un pueblo tranquilo, donde la limpieza del lugar fue impecable y el restaurante ofreció una comida excepcional. Cenamos y desayunamos allí, y la calidad de los platos del mar fue simplemente genial. Las vistas desde la habitación eran impresionantes, pero la habitación abuhardillada podría ser un poco incómoda para algunos. En general, una experiencia muy positiva.

La habitación era limpia y cómoda. Sin embargo, no tienen ascensor para subir las maletas. El restaurante ofrece una comida excelente con productos frescos del mar. Perfecto para disfrutar de vistas a la playa.

buenas vistas pero con problemas de aparcamiento

Las vistas desde mi habitación eran espectaculares, con un ventanal que daba directamente al mar. Disfruté de una cena deliciosa en el restaurante, donde los platos de mar se preparan con ingredientes frescos y el servicio fue excepcional.

La falta de aparcamiento fue un inconveniente, especialmente en las horas pico.

Wi-Fi rápido y desayuno excelente, pero no hay ascensor para las maletas.

De verdad que lo aconsejo para una visita rápida

Pequeño hotel, cómodo restaurante, la ubicación es excelente para explorar la zona, y la atención del personal es realmente amable, además, disfruté de un delicioso desayuno, preparado antes de la hora habitual, y las vistas desde mi habitación eran impresionantes, sin olvidar que está a solo 100 km del aeropuerto.

Me gustó todo

Vaya festival de sabores en el restaurante! Los sándwiches estaban de rechupete, con ingredientes frescos que te hacían sentir en una fiesta. Además, la habitación era muy limpia y todo estaba listo para una estancia agradable. El aparcamiento gratuito al lado del muelle fue un plus gigante, porque durante las fiestas, ¡había plazas de sobra para todos!

Aunque el desayuno de pago fue un poco caro, aún así, todo brilló en nuestra estancia. Un par de pegas, la cama no fue muy cómoda y habían momentos de falta de aparcamiento en horas pico. Pero, ¡todo lo demás dejó un buen sabor!

Las vistas desde la habitación son realmente impresionantes, con un ventanal que da al mar. La habitación estaba muy limpia y era cómoda, lo que facilitó un buen descanso. Sin embargo, la falta de ascensor hizo que subir las maletas fuera un poco complicado. En general, es un buen lugar para escapadas tranquilas.